En los últimos años hemos sido testigos de grandes cambios en lo que se refiere al ejercicio físico. Hasta hace poco la mayor parte de la población que practicaba algún deporte lo hacían para tener el cuerpo con el que siempre habían soñado. Sin embargo, el deporte ya no es algo que se realice simplemente por obligación o por necesidad. El fin estético ha quedado relegado a un segundo plano y la sociedad es cada vez más consciente de los beneficios que esto puede aportar a la salud a lo largo de toda la vida. Y no solamente hacer deporte. Los centros deportivos que ofrecen servicios de nutrición unidos a la práctica del ejercicio de forma habitual para favorecer nuestra actitud mental están proliferando por todos los rincones del planeta. La salud y el bienestar han cobrado especial relevancia. Como ya decían los romanos "Mens sana in corpore sano".
Las terapias antiestrés, el ejercicio, los tratamientos de belleza, los masajes y los spa no son más que el reflejo de una sociedad que rinde culto al cuerpo. Es así como de forma paralela se ha ido haciendo cada vez más popular la figura del entrenador personal que hasta hace poco estaba relacionada solamente con deportistas de élite, pero que hoy puede encontrarse en muchos gimnasios. Según datos de la Federación Nacional de Empresarios de Instalaciones Deportivas, solamente en nuestro país hay actualmente 7.000 centros deportivos de oferta privada que facturan más de 2.000 millones de euros, cifra que va aumentando en un 10% cada año. Siendo las grandes cadenas de franquicias las que reciben el 40% del pastel, con una media de 600 asociados por centro y con unas expectativas de crecimiento que superan el 20%. De hecho, algunas de ellas ya cuentan con 40 gimnasios en diferentes ciudades del territorio nacional.
La figura del entrenador personal: formación y salidas laborales
El entrenador personal es un profesional de la actividad física y el deporte que ofrece información sobre el mundo de fitness y de la psicología, además de asesoramiento personalizado sobre el biotipo de cada cliente y las mejores técnicas para conseguir los resultados que se persiguen. Este profesional es el encargado de determinar qué ejercicios son los más adecuados para cada persona. Competencias que pueden adquirirse a través de un curso de entrenador personal, que se imparte en madrid, barcelona, las grandes ciudades y también de forma online o a distancia, por lo que resulta muy sencillo obtener la formación necesaria para desempeñar esta labor.
Sin embargo, el perfil actual del entrenador personal va más allá de ser un experto en ejercicios y materiales para realizarlos. Debido a la importancia que la salud ha ido cobrando en los últimos años, unida a la práctica del ejercicio físico ha hecho que el entrenador personal se haya convertido en un profesional multidisciplinar que deba tener los siguientes conocimientos:
- 50% de conocimientos en psicología, marketing y ventas.
- 20% de conocimientos en fisiología del ejercicio.
- 20% de conocimientos en anatomía, kinesiología y biomecánica.
- 10% de conocimientos en cualidades físicas básicas.
Las salidas laborales para un entrenador personal varían sobre todo en función de las demandas de la sociedad y del sistema establecido por cada empresa en sus instalaciones. Por lo general suelen realizar actividades de entrenamiento y preparación deportiva, gestión y organización de instalaciones, animación física y recreativa, expresión corporal… Pero además, el entrenador personal también puede ser contratado de manera independiente por el cliente para que guíe su práctica del deporte en casa.
Aunque, como ya hemos dicho, puedes acceder a esta rama profesional a través de la realización de cursos, si no tienes prisa, siempre es más recomendable optar por un FP a distancia o presencial relacionado con el mundo del deporte. Y es que este tipo de técnicos también pueden llevar a cabo su actividad en distintas empresas del sector turístico y del ocio, acompañando a grupos en actividades de entretenimiento y deportivas que pueden desarrollarse en la naturaleza. Con lo cual, tienen mayores oportunidades de inserción laboral en parques naturales, agencias de viajes, campamentos, albergues juveniles, etc.
Y aunque no está tan relacionada con la actividad deportiva práctica, estos profesionales también pueden postular a plazas de profesor de enseñanzas medias tanto en Formación Profesional como en Bachillerato, así como en la educación especial de personas con alguna discapacidad física o psíquica.
En cualquier caso, ya optes por los cursos o por un ciclo de FP, no cabe duda de que mantenerse siempre actualizado y aprender nuevos ejercicios y técnicas de entrenamiento es vital para esta profesión. Los gimnasios deben estar siempre a la última y tener a los mejores profesionales en su plantilla para poder ofrecer a sus clientes siempre lo mejor, ya que la competencia por abarcar la mayor cuota de mercado es brutal. Por este motivo los cursos complementarios de entrenador personal siempre aportan puntos a nuestro curriculum para conseguir mejores oportunidades laborales. Los cursos sobre nuevas técnicas deportivas y de entrenamiento son muy interesantes, pero para aquellos que quieran dedicarse a dirigir empresas deportivas o de animación en el sector turístico también es fundamental tener conocimientos en idiomas pues es uno de los requisitos más valorados.
Por lo general, un entrenador profesional sin experiencia laboral suele empezar cobrando un sueldo de entre 800 y 1.200 euros mensuales. Un salario que puede complementarse con las clases particulares que se impartan de forma independiente y que va aumentando conforme el profesional va ganando experiencia. Aunque lo cierto es que depende mucho también de la valía y de la formación de la persona. Por este motivo, es importante buscar una empresa que apueste por la promoción interna de los empleados, de manera que el profesional pueda demostrar su valía y tener la oportunidad de seguir creciendo dentro de la empresa.