Según los datos del cuarto trimestre de la Encuesta de Población Activa, Granada terminó el año 2016 con una cifra de 127.500 parados, representando 29% de la población. Lo que convierte a la provincia en la sexta con mayor tasa de desempleo de toda España. Con una tasa de paro peor que en el año 2015.
Aunque el año pasado se consiguió aumentar ligeramente la tasa de actividad, no se ha logrado... crear empleo neto, lo que resulta alarmante en un año que ha sido bueno para casi todo el país y en el que la media nacional ha descendido hasta el 18,6%, una cifra que no se veía desde el año 2010. El empleo que se genera en la provincia de Granada es de baja calidad, estacional y temporal, lo que hace que la brecha con el resto de Andalucía y con España siga en aumento, descolgando a Granada de la lucha contra el paro. Afectando a casi todos los sectores, tanto a la agricultura como a la industria y al sector servicio. Solamente el sector de la construcción ha experimentado un ligero descenso del paro.
Pero cabe destacar que la mayor parte de los parados poseen un nivel académico bastante bajo. Hay que decir que el 22% de los estudiantes abandonan en el último curso de la ESO. Este tipo de alumno suele presentar una capacitación muy baja, lo que lo hace mucho más vulnerable ante las dificultades económicas que se van presentando en el mercado laboral, como han sido los años de la crisis. Si la situación continúa esta tendencia, Granada se encontrará con un importante porcentaje de mano de obra de baja cualificación muy poco competitiva que deberá enfrentarse a muchos momentos de inestabilidad y a trabajos precarios a lo largo de su vida laboral.
En cambio, aquellos profesionales que tienen algún tipo de titulación superior más allá de la educación obligatoria presentan tasas de empleo más favorables. Especialmente aquellos que poseen una titulación de FP. Sabedores de ello, el número de estudiantes granadinos que cursan bachillerato ha ido decreciendo en los últimos años, cayendo en un 36% en la última década. En el año 2007 el número de alumnos que hacían bachillerato era del 26,9%, mientras que hoy sólo representan el 7,7%.
En contraposición, la cantidad de alumnos de Granada que ha optado por los cursos de FP se ha incrementado en un 16%. Antes de la crisis, los titulados universitarios salían a un mercado de trabajo muy boyante, pero en la actualidad, los técnicos de FP gozan de tasas de empleo más elevadas. Una opción que hasta hace algunos años estaba muy denostada pero que hoy vuelve a convertirse en una excelente opción para la formación con mucho futuro. Además, decantarse por este tipo de estudios no cierra la puerta a estudios técnicos o universitarios, en los que el alumno puede matricularse más adelante si así lo desea.. Leer más
Aunque el año pasado se consiguió aumentar ligeramente la tasa de actividad, no se ha logrado... crear empleo neto, lo que resulta alarmante en un año que ha sido bueno para casi todo el país y en el que la media nacional ha descendido hasta el 18,6%, una cifra que no se veía desde el año 2010. El empleo que se genera en la provincia de Granada es de baja calidad, estacional y temporal, lo que hace que la brecha con el resto de Andalucía y con España siga en aumento, descolgando a Granada de la lucha contra el paro. Afectando a casi todos los sectores, tanto a la agricultura como a la industria y al sector servicio. Solamente el sector de la construcción ha experimentado un ligero descenso del paro.
Pero cabe destacar que la mayor parte de los parados poseen un nivel académico bastante bajo. Hay que decir que el 22% de los estudiantes abandonan en el último curso de la ESO. Este tipo de alumno suele presentar una capacitación muy baja, lo que lo hace mucho más vulnerable ante las dificultades económicas que se van presentando en el mercado laboral, como han sido los años de la crisis. Si la situación continúa esta tendencia, Granada se encontrará con un importante porcentaje de mano de obra de baja cualificación muy poco competitiva que deberá enfrentarse a muchos momentos de inestabilidad y a trabajos precarios a lo largo de su vida laboral.
En cambio, aquellos profesionales que tienen algún tipo de titulación superior más allá de la educación obligatoria presentan tasas de empleo más favorables. Especialmente aquellos que poseen una titulación de FP. Sabedores de ello, el número de estudiantes granadinos que cursan bachillerato ha ido decreciendo en los últimos años, cayendo en un 36% en la última década. En el año 2007 el número de alumnos que hacían bachillerato era del 26,9%, mientras que hoy sólo representan el 7,7%.
En contraposición, la cantidad de alumnos de Granada que ha optado por los cursos de FP se ha incrementado en un 16%. Antes de la crisis, los titulados universitarios salían a un mercado de trabajo muy boyante, pero en la actualidad, los técnicos de FP gozan de tasas de empleo más elevadas. Una opción que hasta hace algunos años estaba muy denostada pero que hoy vuelve a convertirse en una excelente opción para la formación con mucho futuro. Además, decantarse por este tipo de estudios no cierra la puerta a estudios técnicos o universitarios, en los que el alumno puede matricularse más adelante si así lo desea.. Leer más
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