Trabajar desde casa por Internet, lo que conocemos como freelance, es una de las decisiones más acertadas que pueden tomarse. Muchos lo piensan, pero nunca llegan a hacerlo por temor al fracaso. Es cierto que los comienzos nunca son fáciles. Al contrario de lo que muchos piensan, ser freelance no es algo simple. Requiere de mucho esfuerzo y disciplina, sin importar el sector en el que prestes tus servicios y no olvides nunca la formación continua.
Pero a largo plazo y haciendo algún que otro sacrificio, el riesgo merece la pena. Y es que trabajar desde casa ofrece un amplio abanico de ventajas que no ofrece el trabajo como asalariado en una empresa como es la flexibilidad, el ser tu propio jefe y la posibilidad de conciliar la vida laboral con la familiar más fácilmente. Además, en algunos casos podemos ganar más dinero haciendo el mismo trabajo que ya hacemos en la empresa, aun trabajando menos horas al día.
Trabajar de forma independiente trae consigo tantas ventajas como responsabilidades y la mayor parte de las veces requiere de más tiempo de trabajo que el de la oficina de la que se quiere huir. Esto quiere decir que si estás pensando en trabajar desde casa por Internet solamente por no tener que cumplir un horario y porque estás cansado de tu jefe, ser freelance no es el camino para ti. Pero más allá de todo esto, hay muchos motivos para considerar trabajar como freelance:
• Tener un empleo seguro: aunque no te lo creas, trabajar de forma independiente es uno de los empleos más seguros que existen. Si trabajas en una empresa, tu estabilidad depende de ella. Pero si eres freelance y pierdes un cliente, siempre tendrás otros y margen de reacción para compensar las pérdida de ingresos de ese cliente.
• Fuentes de trabajo ilimitadas: siempre habrá alguien que necesite tus servicios. La clave está en ser constante y saber dónde buscar. Haz bien tu trabajo y ofrece siempre lo mejor de ti. Aprovecha todos los medios que tengas a tu alcance para promocionarte para que los demás vean o que haces y los clientes no tardarán en llegar.
• Mayor libertad: podrás establecer tus propios horarios para aprovechar al máximo las horas del día en que eres más productivo. Además puedes combinar tu trabajo con otras actividades como estudiar, disfrutar de tus hobbies o pasar tiempo con tu familia.
• Independencia económica: trabajar como freelance te permitirá establecer cuánto dinero quieres ganar. Sabes que tienes la opción de ganar más en el grado en el que te esfuerces. Una mayor dedicación al trabajo supone mayores ingresos y la posibilidad de conseguir tus metas más rápidamente.
• Mayor experiencia: al trabajar desde casa por Internet ofrecerás tus servicios a una gran variedad de clientes con necesidades diferentes. Con lo cual ganarás más experiencia participando en proyectos de todo tipo que, como empleado de una empresa, no podrías alcanzar.
¿Cómo pasar de un trabajo tradicional a trabajar desde casa por internet?
Para ser freelance es necesario tener valentía, paciencia y responsabilidad y ser muy conscientes de cuáles son las cualidades que nos hacen únicos. Piensa que Internet es un mundo muy competitivo donde hay profesionales muy cualificados y con mucha experiencia compitiendo por los mismos proyectos que tú quieres. Y es posible que mientras consigues hacerte una reputación online, puede pasar algún tiempo hasta que obtengas ingresos suficientes para vivir y pagar tus facturas, por lo que es importante planificarse bien y estar preparado. Por eso, si has decidido convertirte en freelance, a continuación te daremos algunos consejos sobre cómo trabajar por Internet y cómo abrirte camino.
1. Debes tener cierto colchón económico
Ya hemos dicho que ser freelance no es tarea fácil. Debes estar preparado para pasar un tiempo hasta que los primeros proyectos empiecen a llegar. La cuestión es que no podemos saber a ciencia cierta cuánto tiempo vas a tardar en conseguir tu primer proyecto. Por eso, es importante tener una base económica que te ayude a cubrir tus gastos mensuales durante este tiempo. En el momento que decidas hacer la transición deberás tener ingresos que te permitan salir adelante sin dificultades o encontrar tus primeros proyectos antes de dejar tu trabajo y compaginar ambas actividades a la vez durante un tiempo.
2. Investiga qué puedes ofrecer y cuánto puedes ganar
Es importante que ofrezcas un servicio que te apasione hacer. De lo contrario, el cambio no merecerá la pena y puede que acabes echando de menos aquellos tiempos en los que trabajabas para una empresa. Analiza tus posibilidades e investiga cuánto podrías ganar. Lo ideal es hacer un plan de ingresos y gastos de lo que sería tu nueva vida como freelance. No tengas miedos si no sabes cómo hacerlo. Generalmente pocos asalariados saben lo que realmente vale su trabajo hasta que exploran el mundo freelance.
3. Analiza los costes que tendrá tu trabajo
Cuando te conviertes en profesional independiente, debes analizar los gastos que tendrás cada mes para poder llevar a cabo tu trabajo bien y cómodamente. Ten en cuenta que puede haber costes que deberás asumir y que antes asumía la empresa a las que dábamos nuestro talento.
4. Cómo conseguir clientes
En Internet puedes encontrar plataformas que pueden ayudarte a encontrar tus primeros proyectos. Eso sí, ten en cuenta que no te lloverán los clientes y que es probable que al principio tengas que abaratar un poco los precios. Pero lo realmente importante es tener un buen perfil profesional, ya que esto te abrirá muchas puertas a potenciales clientes a los que puedes ofrecer tus servicios. En este sentido, es imperdonable no formar parte de Linkedin. Pregúntate si tu contrarías a alguien con el perfil que has elaborado. Si tu respuesta es negativa, ponte rápidamente a mejorar tu perfil, añade un portfolio de tus trabajos, haz una buena descripción y potencia tus habilidades.
5. Si no eres responsable, no dejes tu trabajo de oficina
Una de las cualidades indispensables que debe tener cualquier freelance es la responsabilidad, necesaria para cumplir con los plazos, condiciones de los proyectos, atención al cliente y demás. Es cierto que los freelances son dueños de su tiempo, pero si no eres responsable con el trabajo, tu reputación quedará perjudicada y dejarán de requerir tus servicios.
Esperamos que estos consejos te resulten útiles y sepas los factores que debes valorar para pasar de asalariado a freelance. Obviamente no es un camino de rosas, pero a largo plazo las satisfacciones son muy grandes: enriquecimiento personal, mejor calidad de vida y mayor sensación de plenitud y felicidad. Te recordamos algunos de los consejos para ser freelance.